La franquicia Kumon acostumbra a sus alumnos a trabajar desde casa. Además, utilizan un método autodidáctico con el que desarrollan el gusto por los números.

Fuente: www.enfranquicia.info

El pasado 12 de mayo se celebró el Día Mundial de las Matemáticas. Este año, coincidió con la interrupción de las clases que han sufrido millones de niños en España. Como consecuencia, muchos padres se han visto envueltos en una espiral de deberes a los que no sabían como hacer frente.

Probablemente muchos de los que estáis leyendo este artículo, sabréis bien de lo que hablamos. Que si la ficha hay que enviarla en Word o en PDF, que no entendemos los ejercicios de inglés, que tenemos que hacer un dictado, etc.

Sin embargo, para los problemas de matemáticas tenemos una solución. Se trata de Kumon, la franquicia educativa más grande del mundo. A través de programas individualizados, buscan desarrollar el potencial de los más pequeños.

El objetivo es que todos los niños sean lo más autónomos posibles, que aprendan por sí mismos con ayuda de los orientadores y que, además, desarrollen gusto por el estudio.

 

La empresa

En 1958, Toru Kumon, un profesor de matemáticas japonés, fundó el Kumon Instituto de Educación. A través de su método Kumon Matemáticas, pretendía ayudar a su hijo Takeshi a mejorar sus notas en la materia. A parte, también cuentan con programas de inglés y lectura.

Kumon hace que sus alumnos trabajen desde casa durante todo el año. De esta manera, fomentan la implicación de la familia en la rutina de estudio de los críos. Los padres han de crear un ambiente adecuado para el estudio en casa, supervisar la tarea diaria y corregirla.

Dada la situación de excepcionalidad educativa que estamos atravesando, a los alumnos de Kumon les ha costado mucho menos adaptarse a los cambios de estudiar en casa.